^ CUMBRES DE CARTAGENA: SENDERISMO ^: El Mundo de Lietor

Lo primero que me ha sorprendido de la visita al pueblo de Lietor ha sido su parecido físico con Letur, tanto por encontrarse en un cerro elevado, como por la presencia constante del agua, motivo este que tuvo que ser fundamental al elegir el enclave como lugar de residencia de los primeros pueblos fundadores, al existir manantiales de agua en el entorno que supieron aprovechar para su sustento.

Y este parecido físico estoy convencido que ha sido el motivo para que los nombres se parezcan tanto. Así si Letur viene a significar agua honda o profunda, Lietor puede venir según los expertos de “Ili” núcleo de población y “iturri” “or” o “ur” que hacen referencia a la presencia de una fuente o manantial de agua. Por tanto en una interpretación libre Lietor seria el “Pueblo del Agua”. Todo ello siguiendo la teoría de que la lengua vasca tiene su origen en el lenguaje que usaron los primeros pobladores iberos o tartesicos de la península ibérica. Teoría esta avalada por la presencia de núcleos poblacionales prerromanos y que posteriormente el imperio llamó “Letabrum”, en su adaptación al latín y que parece descartar otras que ligan el nombre a los grupos árabes procedentes de Argelia y que se instalaron en Al-Andalus a partir del siglo VIII.

Como ya hemos visto en las visitas a otros pueblos que han tenido un pasado con ocupación de pueblos árabes, las leyendas de tesoros en sus montañas próximas son una constante, como son los casos del Castellar o en el Arabí. Pues bien, en Lietor no es que exista una leyenda existe un caso real de “tesoro” y que sirve de justificación plena para que los buscadores continúen su labor y que las leyendas cobren verosimilitud.

Fue en el año 1985 cuando unos jóvenes, en sus correrías por los montes próximos, se introdujeron en una grieta de difícil acceso, hallando diversos objetos de hierro en el paraje de Los Infiernos, en el cerro de las Muelas a unos tres kilómetros al este de Lietor. Advertido el cura del pueblo del hallazgo y dándose cuenta éste del valor histórico del mismo, se hicieron nuevas expediciones rescatando más de un centenar de piezas. El originen pudo deberse a la ocultación que una personaje de alta clase social realizó de sus más preciadas pertenencias, ante alguna situación de inestabilidad social, que probablemente le costó la vida o la huida, al no volver a rescatarlas.

En cuanto al contenido del “Tesoro” ha quedado ilustrado y comentado en un libro “Lietor: Formas de vida rurales en Sarq” de Julio Navarro y Alfonso Robles. Se puede clasificar según el uso de los objetos en: Agricultura, molienda y pesca; transacciones comerciales; actividades artesanales; objetos de ámbito domestico; armamento y atalaje militar; y varios. Aunque para un cazatesoros esto pueda parecer carente de valor para los historiadores es todo un filón de información. Y como no, la leyenda continua, la zona donde se han encontrado “el peñascal de los infiernos” es una zona que ha tenido gran actividad sísmica, por lo ¿habrá más piezas ocultas en el interior de la tierra y de más valor?

Un paseo por las cuidadas y tranquilas calles peatonales del pueblo nos sumerge en una rica historia, de la que han quedado a modo de testimonio, las edificaciones que puedes admirar y si vienes con tiempo visitar interiormente, cosa que desgraciadamente no fue nuestro caso. Cabe destacar las siguientes:

Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol (Enlace)

Casa señorial de los Rodríguez de Escobar (Enlace)

Casa señorial de los Martínez de Galera (Enlace)

Casa señorial de Los Tovarra (Enlace)

Ermita de Belén.

Fuente de la Plaza Mayor o el Pilar

Miradores

Exconvento de Carmelitas Descalzos

Otros lugares de interés

Junto a este turismo clásico interesado en estos lugares, ha surgido otro tipo más especializado de visitantes y que esta población ha sabido explotar convenientemente, señalizado los lugares en los que se rodó la película “Amanece que no es poco” encontrándose carteles junto a los edificios e imágenes de la película que se rodaron en su interior. Estos curiosos fans hacen quedadas en los pueblos de la Sierra del Segura donde se inmortalizaron estos delirantes personajes que nacen solos, salen de la tierra, levitan, y muchas más cosas fruto de la mente genialmente alucinógena de José Luis Cuerda.

Si estas interesado en este tipo de cine existe una precuela “Total” que puedes ver en la pagina de RTVE. y una segunda parte (que nunca fueron buenas) “Así en el Cielo como en la Tierra”

Información película (Enlace)

Dejando de lado los temas culturales y turísticos, vamos a centrarnos en los aspectos que más nos gustan y que motivan nuestras kilométricas caminatas: el medio natural. La desagradable sorpresa fue que nuestro querido Río Mundo, o “Río Limpio” en su acepción toponímica, una vez que llega a la civilización humana deja de serlo para convertirse en una cloaca. Conforme remontábamos el cauce no pude dejar de sorprenderme de ver un agua turbia, marrón grisácea y con algún que otro desecho en el mismo. En un principio creí que se trataba de la suciedad que arrastraron las ultimas lluvias hasta su cauce procedente de las montañas, cultivos y ciudades, aunque hayan pasado ya unos días de estas.

Sin embargo al llegar a Lietor, justo debajo de su monumental mole rocosa que sostiene la ciudad, hay una caída de agua, a la que todos fuimos a ver y fotografiar pensando que era un salto de agua natural. Lamentablemente debe de ser una cañería del alcantarillado o de la planta depuradora que directamente vierte al río agua sucia o no muy bien tratada por el olor y aspecto que presentaba. Buscando información parece ser que la planta depuradora que han instalado los políticos es tan ineficaz que le cuesta un ojo de la cara a los ayuntamientos su funcionamiento por lo que no todos están dispuestos a usarla, una cacicada más que paga la naturaleza. (Enlace la la noticia)

Dejando al margen este penoso asunto, que notaras especialmente si conoces las cristalinas agua que lleva río arriba, la ruta es una gozada para los sentidos. En un principio íbamos buscando los colores del otoño, pero lo cierto es que este año este se ha retrasado o el verano se ha alargado, por lo que si unimos las altas temperaturas y la presencia de agua, toda la ribera sigue siendo un vergel donde las hojas siguen verdes y se niegan a caer o cambiar de color. No obstante si pudimos captar la incipiente estación en algunos nogales y sobre todo en un día plomizo con algunas gotas de agua típico de la estación.

Comenzamos con el Embalse de Talave, que aunque obra humana, parece un idílico lago natural dejando mil paisajes en nuestras retinas, siendo especialmente llamativa la alargada entrada del río Mundo en el mismo y la más abrupta y retorcida del Barranco de Talave, lugar aprovechado para conectar con el Trasvaso Tajo Segura.

Especialmente recomendable resulta la vega de Talubia donde una amplia llanura se ha formado junto al río y se ha convertido en una zona de huertas, presidida desde lo alto por la Ermita de Santa Bárbara, que por cierto algún trueno nos dejó. Aquí se aprovecha al centímetro el terreno hasta tal punto que el sendero transcurre durante unos metros por encima de la acequia de riego y cubierto por los cañaverales, nogales, álamos y árboles frutales conformando un túnel vegetal.

Finalmente, bajo Lietor, nos encontramos con un paradisíaco lugar como es la Presa del Azud, donde el agua salta los rebosaderos creando chorros por doquier y conformando un pequeño estanque que supongo hará las delicias de los lugareños en los meses más calurosos. Se trata de un área recreativa a la que se accede a través de un renovado puente de madera que se mimetiza con el entorno y desde el que se tiene una magnifica vista del entorno.

Una cómoda excursión en la que podrás conocer sin gran esfuerzo el tramo del río Mundo que transcurre desde la población de Lietor hasta el pantano de Talave, quedando a tu gusto el sentido de la marcha.

Y si te quedas un fin de semana en el pueblo tendrás la oportunidad de realizar desde el mismo otras rutas como la lineal siguiendo el curso del río hasta la vecina población de Ayna o una de las mejores excursiones de la Sierra del Segura, según un libro que consiste en una ruta circular por la zona oeste "Naturaleza, Historia y Arte en Lietor" y que recorre los Cortijos de la Tejera, de Fuente Vieja, el Collado del Pocico, Prado de los Terceros y La Hortichuela, subiendo al pico Tejera y recorriendo parte de la Rambla del Castillejo.

DESCRIPCION DE LA RUTA

Dado que viajamos en autobús no pudimos visitar la presa, lugar que considero el más adecuado para iniciar la ruta y así disfrutar más tiempo del paisaje del embalse, siendo nuestro punto de partida unas casas en la zona del Castillico Km 13 de la A-113. Enlace al punto de inicio

Bordeamos el pantano entrando en el Barranco de Talave pasando junto a unas instalaciones del trasvase y desde se puede observar el gigantesco tobogán por el que transitan las aguas. Seguimos el camino hasta llegar a mitad del tobogán donde una puerta nos impide el paso por lo que tenemos que sortear subiendo hasta la parte cubierta del mismo.

Retomamos el camino hasta llegar a un cruce donde tienes la oportunidad de volver al pantano para bordearlo por la parte más cercana al agua o como hicimos nosotros por sendas bastante perdidas subir al collado de montes sin nombre cruzando un barranco, todo ello sin especial dificultad, salvo el de la orientación sin sendero y los tramos de campo a través, esta fue la pequeña dosis de aventura del día.

Llegados al collado se observa casi completamente el tramo del río Mundo desde la Ermita de Santa Bárbara hasta su entrada en el embalse. A partir de este punto remontamos la cuerda de estas montañas hasta su máxima altura y nos dejamos caer hasta una casa de campo todo esto ya por sendero.

En este punto vemos una pequeña cumbre de 614 metros por lo que aprovechando el tiempo para reagrupar el numeroso grupo la subimos y la bajamos por donde mejor podemos, para unirnos todos de nuevo en la Talubia. Esta es una vega u hoya formada por los aportes de sedimentos del río y que el hombre ha aprovechado su fertilidad para instalar sus huertas.

Comemos bajo la advocación de Santa Bárbara, que más que truenos nos trajo alguna que otra nuez y seguimos por un localizado y señalizado GR a través de huertas y acequias hasta llegar a unas nuevas instalaciones hidráulicas de las que parte el Canal de Hellín. En este punto cabe la posibilidad de finalizar la ruta con una subida tendida hasta el Lietor o continuar por el río para llegar a la Presa del Azud y poder observar las antiguas instalaciones hidráulicas como el viejo molino harinero o las nuevas áreas recreativas junto al cauce.

Desde aquí solo nos queda una fuerte pero corta subida al pueblo donde nos espera el tan ansiado avituallamiento liquido o si lo prefieres hacer la descrita ruta turística por edificios religiosos, nobles y cinematográficos.