^ CUMBRES DE CARTAGENA: SENDERISMO ^: El Cantar: La Venganza

Hace ahora casi un año que nos propuso el club hacer la ruta integral de la Sierra de las Moreras subiendo todos y cada uno de los picos que la conforman: Cabezo de los Pájaros, Morro Blanco, Morrón Blanco y Cantar. Pero esta agreste Sierra no nos dejó, nos tomó el pelo y no mareó haciendo que no encontrásemos con la facilidad requerida los pasos por sus escarpados riscos por lo que nos faltó tiempo y dado que la noche viene pronto a finales de Otoño dejamos para mejor ocasión la ascensión que nos falto: El Cantar. Por tanto esta ruta me la tomé como una venganza contra la Sierra de las Moreras y queda cumplida un año más tarde, tras haber hollado íntegramente sus cumbres.

No obstante, la venganza no es total, ya que me queda en el baúl de los asuntos pendientes poder hacerla en una sola jornada, y como nos ha quedado pendiente en el día de hoy la arista oeste del Cantar, pues empecemos por esta hasta Bolnuevo. Ahora se que es una ruta dura, físicamente hablando, y con algún tramo expuesto al vacío, pero programándola en primavera u otoño, cuando los días son largos se puede hacer a un ritmo llevadero, siempre y cuando no nos confunda de nuevo la sierra.

Con motivos como el presente es cuando echo de menos no haber comenzado antes estas crónicas para poder recordar con más nitidez aquel día, no obstante lo que si retengo es que fue muy ameno y entretenido a pesar de la dureza, así como que empecé a conocer al personal habitual de estas rutas. Y es que hicimos la practica tal vez más agradable, aunque conlleve más riesgos y dificultades, que se puede hacer en la montaña: “aristear”. Caminar por el filo de las montañas, con vistas a las dos laderas, y sorteando como se pueda los obstáculos, es todo un aliciente. Si te gusta esta practica te recomiendo el blog de Javier Aristeando Montañas. Enlace. Por cierto, como se ha incrementado el numero de participantes, apenas fuimos doce personas (no es que tenga buena memoria, he mirado la foto de grupo) aquel día y para esta ha habido que fletar un autobús, ya se sabe el dicho “tiran más unas camisetas que dos carretas”, es un chascarrillo, y supongo que pocos serán los elegidos que alcancen la gloria textil, pero muchos los que habremos disfrutado subiendo a las cumbres que hayamos podido asistir o completar según nuestras posibilidades físicas. No obstante las condiciones para cumplir el programa se han relajado, ya que hay repesca, que incluso la puedes hacer por tu cuenta, eso si con testigos y fotos; si añadís un vídeo y un cura ya tenemos un bodorrio montañero.

El Cantar con sus 493 m es el pico más alto de la Sierra de las Moreras,(diga lo que diga la wikipedia) pese a ser más popular por su accesibilidad y situación central el Morrón Blanco o Cabezo de las Víboras con 489 m. Su denominación oficial es esta con "r" final según los mapas oficiales consultados, no obstante también es bastante común encontrarlo con "l", incluso en documentos del Ministerio de Medio Ambiente así aparece. No se si la confusión vendrá originada por la existencia de una montaña, un pueblo e incluso un barranco llamados Cantal en la próxima Sierra de Lomo de Bas. Todo ello considerando la existencia de dos Sierras de Las Moreras, ya que a unos pocos kilómetros al noroeste existe otra con la misma denominación y cuyo pico más alto es "Cabezo del Cantalar" con 542 m., separadas entre si por la Sierra de las Herrerias.

En cuanto a su topónimo, no existe una definición de la RAE que yo me atreva a aplicar, no obstante y jugando a investigador de las palabras encuentro dos alternativas:

Que dada la peculiar y llamativa forma piramidal de la montaña haga referencia a sus aristas o “Cantos”, creo que puede ser la correcta, y
Que haya habido una derivación del termino “Cantal” (con la que también se conoce) en su acepción de pedrera de rocas grandes, como el Cantalar de Cabo Tiñoso. Esta opción no me parece tan adecuada ya que en la ruta no vi ninguna pedrera de grandes dimensiones. Si sabes la respuesta correcta por favor sacanos de dudas.

Habida cuenta de su nombre "El Cantar", sentí mucho la ausencia de Piri con su mochila yeye o de esos/as marchosos que a la mas mínima se animan a cantar, amenizándonos la ruta, otra vez será. Claro que esta es una opinión muy personal que ya se que tiene detractores con oídos sensibles.

Esta es la tercera de las diez cumbres programadas para este ejercicio y probablemente la de más dificultad técnica, que sin tener pasos de escalada si obliga a poner las manos en las rocas en más de una ocasión y vencer el vértigo al mirar el vacío existente a nuestros pies. También es de las que tiene un perfil más agraciado y atrayente en la distancia, en forma de pirámide con pronunciadas aristas y una cumbre con un picacho sobresaliente por lo que en algunos mapas la denominan “Puntarron”. Todo ello privado de arbolado que le imprime una falsa apariencia de alta montaña, hasta tal punto que Cristóbal la asemeja al mítico “Cervino” (4.478 m de altura – 1.029 m de prominencia ) allá en los Alpes, palabras mayores, en comparación es una maqueta (493 m de altura - 333 m de prominencia), pero nos vale para saciar nuestra sed montañera y la otra se la dejamos a los intrépidos escaladores, aunque quien sabe si algún día podré hacer un trekking hasta su base (ya estoy soñando otra vez).

Como curiosidad, esta es la segunda vez en poco tiempo que me he percatado de la presencia de compañeros/as de otras nacionalidades (ingleses), cosa que me ha llamado la atención sobre todo al oírlos hablar, lastima que me tocó D. Joaquín (el facha) en ingles del BUP, y no les cojo nada más que palabras sueltas, aunque hay compañeros que se les da bastante bien y logran mantener conversaciones largas, vamos yo creo que se entienden. Si esto sigue en aumento el club va a tener que plantearse la internacionalización, teniendo que tener guias políglotas o algún traductor en la ruta y quien sabe si hasta cambiar el nombre CEXI (Centro Excursionista Internacional).

En cuanto a la protección de la Sierra de Las Moreras ha sido incluido en el ZEPA junto con Las Almenaras y Cabo Cope, aqui te dejo el enlace al Plan de Conservación por si estas interesado en un estudio más exhaustivo. Desgraciadamente, salvo que seas un experto, no es la cubierta vegetal ni la fauna un aliciente para visitar esta sierra, casi pelada de vegetación, salvo en el Barranco de Algezares, y de fauna escasa y esquiva. No obstante, donde menos te lo puedes esperar existe un motivo para la protección y la conservación, así en esta sierra seca y árida, existen unas charcas o humedales donde ha encontrado un lugar para desarrollarse la Malvasia cabeciblanca (oxyura leucodephala) es una de las anátidas más amenazadas de Europa Occidental. Está catalogada como En Peligro de Extinción en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas. También figura en el anexo I de la Directiva Aves; en el anexo II del Convenio de Berna relativo a la Protección de Fauna Silvestre de Europa y en el anexo I del Convenio de Bonn de Protección de las Aves Migratorias Amenazadas.

Pero además si te gustan las aves podrás encontrar, en estos humedales proximos a la zona de Bolnuevo: schnura elegans, Anax parthenope, Crocothemis erythraea, Orthetrum trinacria, Fartet (Aphanius iberus) Galápago leproso (Mauremys leprosa), Gaviota patiamarilla (Larus michahellis), Garza real (Ardea cinerea), Garcilla bueyera (Bubulcus ibis), Focha común (Fulica atra), Anade real (Pato azulón) (Anas plathyrhynchos), Porrón europeo (Aythya ferina), Golondrina común (Hirundo rustica), Mirlo (Turdus merula), Carricero común (Acrocephalus scirpaceus), según un avistamiento realizado por ANSE en el año 2009.

Por tanto si estas interesado en hacer esta cumbre o si eres más ambicioso y quieres hacer la integral de todas las cumbres de la Sierra de las Moreras, el principal atractivo que vas a tener es el placer montañero de subir montañas por el mero hecho de hacerlo sin más pretensión, y con todas las dificultades y alicientes que ello conlleva: riesgo, aventura, orientación, vistas desde la cumbre, siendo el resto de atractivos de menor importancia.

No obstante la Sierra de las Moreras cuenta con una popular ruta que atraviesa el Barranco de Algezares ("algedon": yeso) hasta subir al Morron blanco, y en aquel se encuentran una pequeña y antigua cantera de extracción de tierras láguenas de color gris azulado y unas minas de yeso, con sus hornos de calcinación, atravesando la zona más poblada de arbolado (pinos) matorrales como cornicales, palmitos, orobales, tomillo y romero. En la zona también se encuentra una población de Ciprés de Cartagena. Entre la fauna más destacada: la tortuga Mora, Águila Perdicera, Halcón Peregrino y Búho Real. En cuanto al nombre de la Sierra tiene su origen en la importante plantación de Moreras que existía en la misma, que fue deforestada para suministrar combustible a los hornos hace siglos.

Descripción de la Ruta

Dado que estaba planeada una ruta lineal y el gran numero de miembros que asistimos se realizó el viaje en autobús por lo que el inicio del track queda un poco lejos de donde realmente se puede comenzar, el camino de acceso al Barranco de Algezares, por tanto iniciamos con unos "estiramientos" por la inmensa Rambla de las Moreras. Enlace al inicio de la ruta.

Una vez en la pista nos va introduciendo en la Sierra de las Moreras, veremos un cartel de que estamos en una "Paisaje Protegido" y unos centenares de metros más adelante nos desviaremos por un sendero a la derecha para subir en altura con la intención de coger la arista que nos lleve hasta el objetivo.

Una vez en la parte más baja de la arista toca ir remontando las pequeñas elevaciones que nos salen al paso, todas de fácil progresión y sin nombre (288m, 303m, 353m y 382), estamos en la margen izquierda del barranco y hemos llegado a su nacimiento, abajo vemos el Collado de la Paridera y arriba los riscos del Salto del Buey (402 m), al que no subimos y rodeamos por su ladera sur.

Es en esta zona donde, como un sol amaneciendo en el horizonte, empieza a asomarte El Cantar, dejandonos ver su altiva cumbre, detrás de otras elevaciones que nos impiden verlo en su integridad. El sendero no esta señalizado y se pierda con gran facilidad por los matorrales de gran porte, así como por la confluencia con otros senderos y por las torrenteras del agua, por tanto requiere un mínimo de orientación y buen ojo para seguir el correcto y no tener que dar más pasos de los necesarios, no obstante algún osado miembro decidió ir por la parte más alta, como cabra por las rocas, otra opción para los más atrevidos en este tramo del Salto del Buey.

Conforme avanzamos por la arista el terreno tiende a complicarse, a esta altura veremos como el monte tiene en su ladera una especie de cicatriz rojiza, son unas minas, a las que tenemos que dirigirnos y atravesarlas, no vi ningún pozo especialmente peligroso pero ojo que puede haberlo, precaución. Estamos ante el ultimo obstáculo para tener una visión integra de la pirámide de El Cantar, superada esta (432m ) ya vemos la arista final que tenemos que superar.

El ultimo tramo, la ascensión a la cumbre, no tiene la dificultad que yo esperaba, no obstante estas en terreno aéreo donde no puedes cometer fallos o despistes ya que un resbalón puede ser fatal al tener decenas de metros de caída a ambos lados. No existe alternativa hay que ir por la arista ya que los laterales son muy escarpados.

La cumbre forma una pequeña planicie rocosa en la que nos dispersamos para recuperar fuerzas y disfrutar de las vistas. Tienes al alcance de tus ojos desde Peñas Blancas al Atalayon de Castillitos, la Sierra del Algarrobo de Mazarron, La Sierra de Lomo de Bas en toda su integridad, Cabo Cope en el litoral y la recientemente visitada Sierra de la Almenara con su Talayon en el centro saludándonos.

El plan previsto, como decía antes, era hacer una ruta lineal subiendo por la arista este y bajando por la oeste, las dos únicas manera de ascender a este pico. No obstante esta sierra tiene una gran personalidad y no se hace lo que quiera uno sino lo que quiere ella. Para probar como estaba la bajada por la arista oeste unos miembros inician el descenso, a los que me uno, y es asequible, pero los pasos son muchos más complicados que los que hemos tenido que sortear para subir, a esto se une la dificultad que supone el destrepe de las rocas, donde es más fácil una caída y donde siempre se tiene la sensación de vértigo más acusada al estar viendo delante de tus ojos el vacío. Solo eran tres o cuatro pasos (en el trozo que exploramos) los que realmente eran dificiles, pero con un criterio de precaución, dado el gran numero de participantes de la ruta y que el guia conoce de sus aptitudes para estas tareas decide suspender esta bajada para volver sobre nuestros pasos. No importa el objetivo estaba cumplido, pero hay que ver con la puñetera Sierra de Las Moreras como le gusta decir la ultima palabra.

La bajada la realizamos por el mismo lugar hasta llegar al Salto del Buey, justo enfrente del Morron Blanco o Cabezo de las Víboras, donde realizamos un "to tieso p'abajo" para llegar al Collado de la Paridera y seguir el sendero que bordeando y/o atravesando el cauce del Barranco de Algezares nos lleva a la pista, atravesando la zona con más masa de arbolado y pudiendo ver los restos de las antiguas explotaciones mineras tanto de yeso, se veían zonas donde el suelo era practicamente blanco, como de laguenas con su típico color azul-grisaceo, así como la de ruinosas instalaciones, supongo que serian los hornos.

Ya en la pista la seguimos hasta llegar a la carretera donde se ve un manchón amarillo, el autobús que ha venido a recogernos y llevarnos al "Stop" a celebrar la cumbre conseguida, bueno en esta ocasión no asisití al evento dado el retraso experimentado por lo numeroso del grupo y por un pequeño incidente leve en la bajada.